A veces nos toca...

...que las circunstancias de la vida hacen que nuestros caminos tomen rumbos distintos...
A pesar de ello, y de las distancias, si el cariño es verdadero y auténtico, la amistad se mantiene intacta.
Por ahí no nos vemos tan seguido, ni hablamos tanto, obviamente nos vamos a extrañar, es real que ya no va a ser lo mismo; pero con cada nuevo encuentro, es un renacer de vivencias compartidas, experiencias, sentimientos, recuerdos, palabras, silencios, tristezas, alegrías...
Yo siempre llevo mis afectos guardaditos en mi corazón, y de ahí nadie los puede quitar: ni el tiempo, ni las distancias, ni las circunstancias... Sepan que siempre van a tener ese lugar reservado en mi ser.
Y el cariño, los abrazos sinceros, las palabras simples pero profundas, nunca las voy a olvidar...
Porque cada momento compartido, cada tiempo dedicado, cada charla, cada ser, cada vivencia, cada experiencia, nos enriquece mutuamente y nos permite conocernos mejor.