jueves, 29 de julio de 2010

Ser y dejar ser...

Resumen más certero ni palabras más sabias podría haber expresado una amiga respecto a qué es lo que busco y qué es lo que me gusta en mi relación con mis afectos: "ser y dejar ser".
No les voy a mentir, por ejemplo cómo me costó (y en ciertos momentos hoy por hoy me cuesta) dejar de lado los miedos y "dejar ser" al enano en la medida en que va creciendo.
Y en general cuesta, ya se trate de
hij@s, herman@s, padres, pareja, amig@s.
Muchas veces cuesta aceptar a las personas tal cual son, cuesta ver que toman o no toman decisiones por hacer algo con sus vidas, cuesta no emitir opinión cuando uno ve que van por un camino que no es correcto para nosotros, cuesta no meterse y permitir al otro equivocarse y volver a empezar, cuesta respetar que hay quienes no quieren ayuda, cuesta ver sufrir al otro y no poder hacer nada.
Cuesta... pero es sano; es sano para uno y es sano para los demás.
Precisamente, eso es lo que hago "ser y dejar ser" (o lo intento sinceramente, y si en algún momento no lo hago, por favor me lo dicen); brindar lo mejor de mí siendo yo y dejando ser; aceptar a mis afectos como son; quererlos y aceptar lo que tienen para brindarme; quererlos por lo que son y no por lo que a mí me gustaría que fueran; comprometiéndome y respetando desde lo más profundo de mi ser lo que cada uno es, lo que quiere ser, lo que me brinda y lo que de mí necesita o en lo que yo pueda ayudar y/o aportar. Y también busco lo mismo, es decir, un ida y vuelta, que los demás sean y que me dejen ser, que me acepten como soy y que no me intenten cambiar.
Tampoco soy la "Madre Teresa de Calcuta", ni me lo creo, jejeje. No acepto ni busco que me acepte todo el mundo, por eso sólo me referí a mis afectos.
Siendo sincera, y un poco a modo de dejarlo plasmado para después poder releerlo cuando yo haya logrado trabajar al respecto, hay una sola persona con la que no tengo este tipo de relación: es alguien con quien la vida me cruzó hace más de 30 años. Reconozco ciertos cambios en mí al respecto, pero no es una aceptación total. Y bueno, eso también es parte del proceso de cambio al que me refería en la entrada anterior.

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